- Palmi
- Seminara
- Melicuccà
- Acquaro di Cosoleto
- Delianova
- Sant'Eufemia d’Aspromonte

La Costa Viola, trecho que se extiende hasta Villa S. Giovanni y es así llamado por el color violáceo de su mar, inicia en Palmi, moderna ciudad con grandes plazas y largas avenidas situada sobre una terraza que sobresale hacia el mar en el extremo norte-occidental del Aspromonte dominada por el monte Sant’Elia. Las primeras noticias históricas de Palmi se remontan al 1310, pero sus orígenes son quizás del s. X. La belleza del lugar es particularmente atrayente de la variada y rica vegetación de la cual es deber citar las lozanas palmeras, los jardines de naranjos, los olivaes de formas impredecibles. Etapa fundamental de la ciudad queda la Casa della Cultura “Leonida Rèpaci”, punto de referencia cultural no sólo para la ciudad, sino para toda la Calabria y no sólo. En ella están ubicados los locales de la Biblioteca comunal “Domenico Topa” rica de volúmenes y de obras sobre Calabria y el Mezzogiorno d’Italia, del Museo cívico de etnografía y de folklore “Raffaele Corso”, inaugurado en el 1955 y dedicado al ilustre etnólogo y folklorista R: Corso de Nicotera (1883-1965); en el cual se encuentra una amplia e importante selección de objetos folklóricos calabreses; del Museo cívico”Franceso Cilea y N.A. Manfroce” inaugurado en el 1962 y que custodia la biblioteca musical del palmese Francesco Cilea (1866-1950); la sección dedicada al Antiquarum “Nicola Rose” que recoge materiales provenientes principalmente de Taureana que datan de un arco cronológico comprendido entre el VII a. de C y el XI d. De C. Además es de señalar la Chiesa Madre, la Chiesa del Soccorso, la Chiesa del Rosario, el Santuario de la Madonna del Carmine, en la localidad de Pietrenere las ruinas de la Torre delle Pietre Nere, en la localidad S. Fantino la Torre de S. Francesco, el Monumento a Cilea, el Castillo de Tauriana del cual quedan los restos de la solidísima construcción en las cercanías de la Torre de Vedetta. A pocos kilómetros de la pequeña ciudad se encuentra el Lido de Palmi que, en el centro de una bella ensenada de finísima arena circundada por sugestivas escolleras, hospeda establecimientos balnearios bien equipados, modernos hoteles y óptimos restaurantes.

De Palmi, después de sólo 3 km es posible llegar a Seminara, pequeña ciudad fundada, segun muchos estudiosos, entre el séptimo y el octavo siglo de la cercana Taureana,. Atravesada de la calla Popilia (la gran arteria que en época romana unía Roma con Reggio Calabria), la ciudad podía controlar un vasto territoria a través del cual los ejércitos estaban obligados a transitar para llegar a Sicilia. Por tal motivo en aquel tiempo se circundó de apropiados muros perimetrales con cuatro puertas munidas de torres y un gran castillo.
Testimonio de la viva fe religiosa y del poder eclesiástico que gestionaba gran parte de la vida pública y el extraordinario número de iglesias y conventos existentes dentro y fuera de los muros de la ciudad. Al centro de la pequeña ciudad se erige el santuario de la Madonna dei Poveri que custodia la Sacra Immagine della Madonna, meta y culto de muchas poblaciones de la Calabria y de la Sicilia. La obra representa la Madonna con el Bambino Gesú, es una vetustísima estatua en madera de color negro (“Nigra sed formosa”), de poco más de 90 centímetros de altura, de fabricación oriental llevada a Taureana por los monjes Basiliani arrivados a nuestros lidos cuando el Imperatore Leone el Isaurico, en el s. VIII, ordenó la destrucción de todas las Immagini Sacre que custodian una pala de mármol que representa la Epifania y que se presenta con uno de los más significativos y preciados productos de la época renacentista.
Dejando Seminara y prosiguiendo en la SS 112 por 6 km en dirección sur, se llega a Melicuccà. El pueblo que surge en un declive y domina un paisaje que sobresale por la presencia de olivares, se presume sean de origen bizantino. Su edificación se remonta al 650 d. C y su nombre originario de Grecia, fue mantenido hasta el 1700, fecha en la cual se adopta la actual denominación, que probablemente deriva de un mapa griego, el “melicoccon”. A sólo 12 km de distancia de Melicuccà, transitando la SS 112 y pasando el centro de San Procopio (en cuya iglesia del Rosario es posible admirar la estatua de mármol de la Madonna con el Bambino del 1532) se llega al Acquaro di Cosoleto, que debe su fama al santuario dedicado a San Rocco. En el cual es conservada una imagen del santo que es meta de continuos pelegrinajes de parte de los fieles porque es considerada milagrosa. Siguiendo siempre la SS 112 se llega a Delianova, definida la “porta dell’Aspromonte”. Este centro, que surge sobre el alto valle del torrente Diverso, se proyecta dominándola, en la ilimitada extensión de olivares de la Piana di Gioia Tauro. En el centro histórico se encuentran numerosos palacios nobiliarios, caracterizados por portones monumentales realizados en piedra verde que testimonian la gran habilidad de maestros .escarpeladores activos en la zona. La iglesia parroquial de Delianova, dedicada a San Nicola, custodia una interesante estatua que se remonta al s XVI, que representa la Madonna de la Visitazione y una columnita de mármol alabastrino que data del s. XIV. En la parte del pueblo está ubicada la iglesia de la Assunta de estilo neo renacentista que hospeda una estatua en mármol de la Inmaculada de fines del s. XVIII. Dejando atrás Delinova, percorrendo todavía la calle estatal por aproximadamente siete km , se llega a Sant’Eufemia d’Aspromonte, activa ciudad circundada por espesos bosques de castaño. Para valorar la tesis sobre el origen de la antigua Sant’Eufema hay numerosas referencias arqueológicas halladas en su territorio: monedas de bronce de la edad romana, ánforas, objetos varios y además un cuchillo de sílice.